Entre hechizos: Magia y Brujería Mexicana

¡Hola Witches, hemos vuelto con un nuevo blog!

Estos últimos meses han estado cargados de mucha energía mágica ya que terminamos Halloween y empezamos el día de los muertos. Como seguimos en el spooky mood y yo siendo bruja de corazón, les quiero platicar de un tema muy interesante para mí: la magia y brujería en mi país.

Siendo un país primordialmente indígena donde muchas personas le siguen rezando a dioses y usan los poderes de la naturaleza, la magia siempre ha existido en México y se sigue viendo en cada rincón. Desde tiempos prehispanánicos, nuestros antepasados han practicado brujería para diferentes propósitos, desde curar un simple dolor de cabeza, hasta proteger a alguien de la muerte. Cuando empezó la época colonial, el contexto de la magia empezó a cambiar drásticamente ya que el catolicismo lo categorizaba como algo del demonio. Poco a poco, las brujas de México empezaron a esconderse porque la magia era prohibida y castigada severamente. A pesar de vivir en estos tiempos de persecución, la magia no se extinguió, y las brujas empezaron a evolucionar su magia poco a poco, incluyendo aspectos cristianos, criollos y mestizos para crear la bruja que existe hoy en día. También, poco a poco, el término de “bruja” ha ido cambiando con los años y ahora tiene un contexto mucho más diferente que en tiempos antiguos. Muchas brujas se enfocan en magia blanca, lo que tiene que ver con sacar sus poderes mediante los cosmos, los cristales y la naturaleza, usándola para bienes más contemporáneos.

Aun cuando la magia es más aceptada en nuestros tiempos, mucha gente sigue viendo a las brujas como seres malignos y diabólicos. Pero de verdad, ¿qué tiene de malo ser bruja? Muchas personas se sienten amenazadas con la libertad de las mujeres y la manera en la que descubrimos y tomamos el poder que tenemos cada día. Las mujeres a las que categorizaban como brujas eran simplemente personas que no entraban en los estereotipos de una mujer ideal: aquella que fuera callada y sumisa. Las brujas eran aquellas que gozaban su independencia y se “rebelaban” al patriarcado. Es por eso que para mí, él ser llamada “bruja” es un halago, porque ellas son seres poderosas, unidas a la naturaleza y muchas veces nobles y protectoras. Entonces, la siguiente vez que una persona te grite, “¡eres una bruja!” tómalo como cosa buena. No teman a descubrir su lado mágico, siempre y cuando usen sus intenciones con respeto y sus prácticas de brujería sean con corazón puro.

¿Ustedes qué piensan de este tema? ¿Se consideran brujas? Déjenme sus comentarios, me encantaría platicar con ustedes.

Con amor,

Lore, Founder Witch